YO Y MI CHIMENEA
EL PUDÍN DEL POBRE Y LAS MIGAJAS DEL RICO
MELVILLE, HERMAN
Un viejo granjero, aficionado a fumar en pipa ante la chimenea de su casa, y poco amigo del trabajo, de los cambios y de las modernidades, se ve acosado por todos para que derribe la inmensa chimenea y remodele la casa con un sentido práctico y económico. Su mujer, sus hijas, los vecinos, los arquitectos y constructores intentan convencerlo. Verdaderamente, la chimenea es descomunal, desproporcionada: toda la casa parece haberse construido a su alrededor y el hombre se ve acosado por razonamientos que parecen incontestables. Pero el viejo opone otras razones: la finca tiene su roble, su camino
y su chimenea. Sin ellos perdería su carácter, y él a la compañera de sus tardes de pipa y abandono.
Una genial novela corta, llena de humor, contra la uniformidad de las convenciones modernas.
Herman Melville, novelista estadounidense y una de las principales figuras de la historia de la literatura. Su exploración de los temas psicológicos y metafísicos influyó en las preocupaciones literarias del siglo XX, a pesar de que sus obras permanecieron en el olvido hasta la década de 1920, cuando su genio recibió finalmente el reconocimiento que merecía. Melville nació en Nueva York, el 1 de agosto de 1819, en el seno de una familia en decadencia. En 1850 se estableció en una granja cerca de Pittsfield (Massachusetts), donde entabló una estrecha amistad con Nathaniel Hawthorne, autor que ejercería una gran influencia en Melville y a quien éste dedicó su obra maestra, Moby Dick o la ballena blanca (1851).
Un viejo granjero, aficionado a fumar en pipa ante la chimenea de su casa, y poco amigo del trabajo, de los cambios y de las modernidades, se ve acosado por todos para que derribe la inmensa chimenea y remodele la casa con un sentido práctico y económico. Su mujer, sus hijas, los vecinos, los arquitectos y constructores intentan convencerlo. Verdaderamente, la chimenea es descomunal, desproporcionada: toda la casa parece haberse construido a su alrededor y el hombre se ve acosado por razonamientos que parecen incontestables. Pero el viejo opone otras razones: la finca tiene su roble, su camino? y su chimenea. Sin ellos perdería su carácter, y él a la compañera de sus tardes de pipa y abandono. Una genial novela corta, llena de humor, contra la uniformidad de las convenciones modernas.