EL SIGNIFICANTE IMAGINARIO
PSICOANÁLISIS Y CINE
CHRISTIAN METZ / CHRISTIAN METZ
A principios de la pasada década de los sesenta, el teórico Christian Metz tuvo una idea que luego resultaría trascendental para los estudios cinematográficos: lo que él llamaba el "objeto-cineö debía abordarse con las armas de la lingüística, dotando a la disciplina así fundada de un rigor puramente científico. Más allá de la mera crítica periodística, pues, la semiología aportaba a la reflexión sobre el cine una dimensión teórica, algo que hasta entonces había estado fuera de su alcance.
El abordaje de este "objeto-cineö desde la perspectiva del psicoanálisis se inscribe, para Metz, en el mismo campo de investigación y se sitúa en idéntico nivel. No se trata de psicoanalizar a los autores o a sus criaturas, sino de enfrentarse al cine entendido como institución y arte específico, como un "significanteö que opera en la región de lo "imaginarioö, tanto con ritos de repetición como con procedimientos tecnológicos. El significante imaginario, convertido automáticamente en un clásico de
A principios de la pasada década de los sesenta, el teórico Christian Metz tuvo una idea que luego resultaría trascendental para los estudios cinematográficos: lo que él llamaba el ?objeto-cine? debía abordarse con las armas de la lingüística, dotando a la disciplina así fundada de un rigor puramente científico. Más allá de la mera crítica periodística, pues, la semiología aportaba a la reflexión sobre el cine una dimensión teórica, algo que hasta entonces había estado fuera de su alcance.
El abordaje de este ?objeto-cine? desde la perspectiva del psicoanálisis se inscribe, para Metz, en el mismo campo de investigación y se sitúa en idéntico nivel. No se trata de psicoanalizar a los autores o a sus criaturas, sino de enfrentarse al cine entendido como institución y arte específico, como un ?significante? que opera en la región de lo ?imaginario?, tanto con ritos de repetición como con procedimientos tecnológicos. El significante imaginario, convertido automáticamente en un clásico desde su aparición en 1977, es en el fondo el doble pseudónimo del cine visto desde una perspectiva freudiana.