PP.SURREALISMO PARA PRINCIPIANTE
RIAL UNGARO, SANTIAGO / SANYU
Para el surrealismo -el movimiento artístico más importante entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial-, el enemigo principal que había que combatir era la razón. Su finalidad trascendía al arte: apuntaba a transformar la vida a través de la liberación de la mente. La religión, la moralidad, la familia y la patria se convirtieron así en instituciones a revisar. Apelando al poder del subconsciente, el automatismo psíquico, la vida onírica e incluso la locura, el surrealismo exploró las profundidades del espíritu humano. Desde cualquier punto de vista, el surrealismo siempre intentó ser una revolución.
André Breton (1896-1966) fue el supremo sacerdote de esta singular cofradía de iniciados por la que pasaron figuras como Louis Aragón, Paul Eluard, Tristan Tzara, Luis Buñuel, Salvador Dalí, Max Ernst, Antonin Artaud, Picabia, Marcel Duchamp y muchos otros artistas, principalmente plásticos y poetas.
En la actualidad, entender su historia implica simultáneamente el desafío de replantearnos nuestras propias vidas, el lenguaje y los sistemas de pensamiento con los que nos comunicamos y actuamos. Eso es, justamente, lo que propone Surrealismo para Principiantes, más allá de contar la historia del movimiento y sus protagonistas.