EMOCIONES SONORAS
DE LA CREACIÓN ELECTROACÚSTICA, LA IMPROVISACIÓN LIBRE, EL A
JOSEP LLUIS GALIANA
EMOCIONES SONORAS contribuye a restituir una parte de lo vivido, a enmarcar unas vivencias, unos sentimientos, unas inquietudes y unas emociones compartidas en una época particularmente intensa. Una época llena de incertidumbres y caracterizada por un convulso cambio de milenio. Se trata de una amplia selección de alrededor de trescientos escritos musicales que hablan de la creación electroacústica, la improvisación libre, el arte sonoro y las músicas experimentales en España. Testigo de cómo las nuevas generaciones de músicos y artistas sonoros se han comprometido con las últimas propuestas estéticas y nuevas formas de hacer música, Josep Lluís Galiana describe situaciones sonoras concretas y reflexiona sobre determinados acontecimientos artísticos en un asequible tono divulgativo. EMOCIONES SONORAS recoge críticas, entrevistas, reseñas y artículos, en su mayor parte publicados en el periódico Levante-EMV, pero también notas a discos y programas de conciertos, así como alguna conferencia, trabajo de investigación o monográfico inéditos o publicados en otros medios de comunicación.
Todos estos escritos nos remiten a una larga etapa de actividad profesional del autor en sus diversas facetas como periodista, gestor cultural, músico y docente, comprendida entre los años 1992 y 2015, y a un espacio geográfico circunscrito principalmente a la ciudad de Valencia. Habitadas por centenares de compositores e intérpretes y las poéticas de creadores sonoros procedentes de todos los rincones del planeta, las páginas del presente volumen transitan a lo largo de casi un cuarto de siglo marcado por una urgente (r)evolución musical que afectó a lenguajes, estéticas y formas de hacer y escuchar las nuevas creaciones sonoras. Una revolución que dio como resultado impensables hibridaciones, inusitados juegos interdisciplinares e increíbles cambios tecnológicos aplicados a la creación sonora. Emociones sonoras nace de la firme creencia en el «compromiso de hacer historia, recalando en aquellas músicas más imaginativas que nos hacen ampliar horizontes y las ganas de vivir compartiendo emociones», señala el crítico Rogelio Pereira. En palabras del autor, «la música es pura fisiología, se aferra a nuestras vísceras, nos hace vibrar, nos golpea el pecho y nos pone en movimiento, y la emoción es una reacción ante cualquier estímulo que va a condicionar nuestra conducta, y se activa de muy diversas maneras. Es verdad que los sonidos, afirma Galiana, tienen una fuerza física, inconsciente, pre racional y quasi animal que nos aleja del pensamiento para entregarnos a la emoción en su estado más puro».